La celulitis sí tiene remedio
El ácido poli-L-láctico es un excelente aliado contra la enemiga femenina número uno: la piel de naranja. Hablamos con la doctora Beatriz Beltrán, experta en este quita-sueño.
El capitoné nos trae por la calle de la amargura. Y es que la celulitis afecta al 85% de las mujeres en el mundo. Por más que hagamos dieta, deporte, bebamos agua como si no hubiera un mañana y nos alejemos de la vida sedentaria, lo cierto es que son pocas las afortunadas a las que la genética nos les ha hecho el regalo envenenado. La doctora Beatriz Beltrán, médico internista de formación, eligió hace tiempo la medicina estética. Y lo cierto es que la borda. Su clínica, en pleno Paseo de Gracia, en Barcelona, es experta en tratamientos sin cirugía, facial y corporal. Allí ofrecen “lo último a nivel mundial para conseguir un amplio abanico de tratamientos para el rejuvenecimiento y la remodelación corporal con los máximos resultados posibles sin cirugía”, explica la doctora. “Nuestra premisa es siempre conservar la naturalidad con la prevención y corrección, pero siempre potenciando el atractivo de cada mujer sin que pierda la esencia de sí misma”, prosigue. En la clínica que lleva su nombre trabajan a 360 grados, eliminan la grasa con criolipólisis reforzando los músculos con tecnología HIFEM (campos electromagnéticos de alta intensidad, como si fuera gimnasia pasiva), y la flacidez con láseres y estimuladores de colágeno. Pero si con algo está contenta la doctora es con la nueva generación de ácido poli-L-láctico. “Trabajo con este activo desde hace 15 años, pero la nueva presentación nos permite trabajar a nivel facial y corporal zonas que antes no podíamos trabajar porque las formulaciones no abarcaban amplias áreas de tejidos como las que ocupan a la celulitis. Eso nos da esa versatilidad que antes no podíamos tener, cuenta Beltrán.
Nuestra premisa es siempre conservar la naturalidad con la prevención y corrección, pero siempre potenciando el atractivo de cada mujer sin que pierda la esencia de sí misma
Hay muchas mujeres a las que la celulitis se les deposita en los glúteos, y la doctora Beltrán la aborda (y la borda) desde diferentes ángulos. “Lo más importante de todo es hacer un buen diagnóstico, porque no todos los glúteos son iguales, a algunos les sobra grasa, a otros les falta proyección porque están aplanados, y es que a medida que pasan los años vamos perdiendo grasa, colágeno y elastina, y el músculo del glúteo se deprime un poco y también cae. Nosotros analizamos cuál es exactamente el problema en cada caso, y lo tratamos con un abordaje multidisciplinar. Si sobra grasa, primero la quito con crio; si la paciente necesita músculo, utilizo HIFEM para estimular el músculo con gimnasia pasiva de ultima generación, pero siempre echo mano del ácido poli-L-láctico. Con una sesión al mes recuperamos el contorno y mejoramos la proyección del glúteo, pero de manera muy natural”.
El ácido poli-L-láctico es el estimulador de colágeno que más estudios tiene a nivel mundial. Se ha visto que este ácido estimula la producción de colágeno tipo I, que es el que permite que nosotras seamos capaces de generar ese contorno que hemos perdido de forma natural. Permite que esa zona quede redensificada y rellena, mejorando mucho la calidad de la piel. Se necesitan de 2 a 4 sesiones, dejando pasar 2 meses entre una sesión y otra. “Cuando quiero eliminar celulitis, voy a capas más superficiales con una cánula más finita y creo un abanico. Si en el camino me encuentro alguna fibrosis, libero el septo. Para unos glúteos medios utilizo un promedio de 2 viales por sesión, que dura media hora. Aplicamos anestesia, pero la verdad es que molesta muy poco. Después, en casa tienen que masajear la zona durante los primeros días. A los 3 meses van a notar una mejoría de la calidad de la piel muy buena. La duración del efecto es de más de dos años, pero entonces vas a requerir la mitad del producto que necesitamos la primera vez, porque no se va de todo y porque tu organismo ya ha generado nuevo colágeno”, termina la experta.